Sopas

Sopa fría de melón con jamón

Sopa fría de melón con jamón: frescura ibérica en cada cucharada

Hay platos que saben a verano, a sombra en la terraza y a sobremesas ligeras. Esta sopa fría de melón con jamón es uno de ellos. Dulce, suave y sorprendentemente sencilla, combina el frescor del melón con el contraste crujiente del jamón serrano, creando una receta fácil y elegante que conquista desde la primera cucharada.

Ideal como entrante para días calurosos o como cena ligera con un toque gourmet, esta sopa se prepara en apenas 15 minutos y no necesita cocción. Solo buen producto, un yogur natural para darle cuerpo, unas virutas de jamón tostado y un chorrito de aceite de oliva virgen extra para redondear el sabor. Porque en Cocinero Ibérico creemos que la cocina tradicional también puede ser fresca, rápida y con carácter.

Sopa fría de melón con jamón

Raciones

4

Personas
Tiempo de preparación

15

minutos
Calorías

80

kcal/ración

Ingredientes

  • 1 kg de melón ya cortado

  • 1 yogur natural

  • 2 o 3 lonchas de jamón serrano

  • Sal y pimienta negra recién molida

  • Unas hojas de hierbabuena

  • AOVE

Preparación

  • Coloca 1 kg de melón troceado (sin piel ni pepitas) en el vaso de la batidora junto con 1 yogur natural. Tritura hasta obtener una crema fina y homogénea. Este será el corazón de tu sopa fría: dulce, suave y refrescante.

    Sopa de melón con jamón 1 (2)
  • Incorpora sal y pimienta negra recién molida al gusto, unas hojas de hierbabuena y un chorrito generoso de aceite de oliva virgen extra (AOVE). Vuelve a triturar para integrar todos los sabores. La hierbabuena aporta frescor, y el AOVE redondea el conjunto con su toque afrutado.

    Sopa de melón con jamón 1 (1)
  • Vierte la mezcla en un recipiente, tapa y guarda en la nevera durante al menos 1 hora. La sopa debe estar bien fría para que resulte realmente refrescante al servir.

  • Corta 2 o 3 lonchas de jamón serrano en virutas finas. Tuéstalas en una sartén sin aceite, a fuego medio, hasta que estén crujientes. Este paso aporta textura y ese contraste salado que eleva el plato.

  • Reparte la sopa fría en cuencos o vasos. Decora con las virutas de jamón crujiente, unas hojas de hierbabuena frescas y un chorrito extra de AOVE. Sirve inmediatamente y disfruta de un entrante veraniego con sabor ibérico.