
Sopa fría de melón con jamón
INGREDIENTES
1 kg de melón ya cortado en trozos, sin piel ni pepitas.
1 Yogur natural
2 o 3 lonchas de jamón serrano
Sal y pimienta negra recién molida (al gusto)
Unas hojitas de hierbabuena
AOVE


La sopa fría de melón es un plato refrescante y nutritivo que se puede preparar en poco tiempo. Es ideal para los días calurosos de verano, ya que ayuda a hidratar el cuerpo y aporta vitaminas y minerales. El melón es una fruta con alto contenido en agua y fibra, que favorece la digestión y la saciedad. Además, tiene propiedades antioxidantes y diuréticas, que ayudan a eliminar toxinas y a prevenir el envejecimiento celular. Para hacer la sopa fría de melón, solo se necesita un melón maduro, yogur natural, menta fresca, hierbabuena, o cualquier hierba refrescante, sal y pimienta.
Un plato muy sencillo y rápido de preparar, que nos refrescará en estos días de tanto calor.
También le añadiremos unos crujientes de jamón serrano, lo que dará una textura muy agradable.
Esta sopa es una delicia gastronómica que combina la dulzura del melón con la textura salada y crujiente del jamón, creando un plato refrescante y sofisticado. Para empezar, se selecciona un melón maduro, preferiblemente de tipo cantalupo o piel de sapo, que se corta en trozos y se retiran las semillas. Se pasa el melón por una licuadora o procesador de alimentos hasta obtener un puré suave. A continuación, se añade al puré de melón un chorrito de aceite de oliva virgen extra, y una pizca de sal y pimienta al gusto, mezclando bien todos los ingredientes.
Para el jamón, se utiliza jamón de buena calidad, que se corta en lonchas finas y se dora en una sartén.
La presentación de la sopa es clave para realzar su elegancia. Se sirve la sopa de melón bien fría en cuencos individuales, adornando con unas hojas de menta fresca o hierbabuena para aportar un contraste de color y sabor. Justo antes de servir, se añaden los trozos de jamón crujiente sobre la sopa, lo que añade un interesante juego de texturas y sabores que deleitará a los comensales.
Esta sopa es ideal como entrante en los días calurosos de verano, ofreciendo una experiencia culinaria ligera pero llena de matices. Además, es una receta que permite variaciones según el gusto personal, como añadir un toque de jengibre o lima para darle un giro exótico, o incluso un poco de yogur o crema agria para quienes prefieran una consistencia más cremosa.
Preparación
Comenzamos triturando el melón y el yogur, trituramos hasta obtener una crema fina.
Ahora añadimos la pimienta negra recién molida, la sal, un chorrito de AOVE y unas hojas de hierbabuena.
Volvemos a triturar todo muy bien para integrar todos los ingredientes.
Una vez triturado todo ponemos en un recipiente, tapamos y metemos al frigorífico hasta que esté bien fría.
A la hora de servir cortamos unas virutas de jamón y las ponemos en una sartén sin nada de aceite y las hacemos hasta que queden crujientes.
Servimos adornando con las virutas de jamón, un chorrito de aceite de oliva y unas hojas de hierbabuena.



